ANACARDO FRITO

El árbol del anacardo denominado Anacardium occidentale (también llamado cajú), es originario de la cuenca del Amazonas (Brasil y Bolivia), por lo tanto es de origen tropical. Posee unas excelentes propiedades medicinales y nutricionales.

El anacardo posee una curiosa peculiaridad, ya que produce el fruto fresco y el fruto seco a un mismo tiempo.

Es un fruto seco sumamente rico en ácidos grasos insaturados, entre los que especialmente destacan el linoleico y el oleico. Por este motivo, es conocido que este pequeñísimo pero potente fruto seco, es ideal para cuidar tanto nuestro sistema nervioso como nuestra piel.
Además es un fruto seco capaz de bajar el colesterol alto (sobretodo el colesterol malo, LDL) y aumentar los niveles de colesterol bueno (HDL). Por ello, cuida y protege nuestro corazón
Los anacardos son muy ricos en vitaminas del grupo B, nutrientes necesarios para nuestro corazón, para el cerebro y los músculos, así como para ayudarnos a asimilar los hidratos de carbono.
También tiene una alta cantidad de magnesio, que es muy importante para la formación ósea, la contracción muscular y la transmisión nerviosa.
Son unos frutos secos muy buenos a la hora de aumentar las defensas, son recomendables sobre todo en los meses de otoño y de invierno, en los que necesitamos reforzar el sistema inmunitario.